Votad malditos.

La gente anda dudando a quién votar el domingo. Pues todo es cuestión de priorizar las necesidades de cada uno, de que el sentido común se asiente sobre la papeleta. No mirar las siglas, esto no va de futbol; obviar los programas, jamás los cumplen. Son generales, no se elige al alcalde de tu pueblo, se elige a los que van a legislar los próximos cuatro años. No resultará fácil acertar, pero sí lo será errar a conciencia. El líder ganador formará gobierno, y será el encargado de gestionar nuestros tiempos, nuestra economía domestica, nuestros pequeños sueños. No lo tenemos fácil, la mediocridad, la falta de capacidad para gobernar es palmaria en todos los candidatos, por eso, deberemos confiar en nuestro sentido común para tratar de vislumbrar quien será capaz de hacerlo menos mal. Recuerda que si te engañan una vez, la culpa será de aquel, pero si ese mismo te engaña dos veces, la culpa será tuya.