Pedro el asambleario

Había una lucha interna, de acuerdo, siempre las hay cuando los resultados electorales no son los apetecidos. Pedro Sánchez ha actuado a lo Erdogan, ha tratado de golpear primero a los golpistas de su propio partido y se les ha ido de las manos a unos y a otros. Al secretario general del PSOE solo le queda la dimisión, ya que alargar la agonía con una resistencia numantina, no impedirá que la antigua Roma se haga con la actual Soria.

En contra del art.6 de la CE, los partidos políticos no son democráticos. Esto lo sabe Pedro Sánchez, así que me resulta cuando menos esperpéntico que pretenda una democracia asamblearia. El afiliado elige a sus representantes y estos constituyen sus escalas de poder creando órganos y cargos. Las primarias, no dejan de ser un atisbo de romanticismo que nunca acaba bien si una de las partes se enamora de otro.

La torpeza de los dirigentes tratando de imponer unas primarias para ganar tiempo, ha supuesto el levantamiento de los que no veían viable un pacto antinatura con los independentistas. Éstos confiados en la ética que nunca se da en la clase política, creyeron que Pedro se entregaría. Éste, conociendo el destino de Santiago Nassar, ha preferido cerrar las puertas en la creencia que ya estaba dentro.